Crónicas de un periodista… El ingeniero Guillermo Garnier, custodio de los íconos de la presa “Miguel Hidalgo” del Pueblo Mágico de El Fuerte de Montesclaros.

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Por: Agustín Torres Sotomayor

El pasado domingo 22 de agosto, Rosario Blanco ‘el chayito’, se secaba el sudor mientras revisaba las mallas de pesca que había dejado una tarde antes en las aguas revueltas de la presa “Miguel Hidalgo” o la presa de El Mahone, como todos la conocemos.

Eran las 2 de la tarde cuando el cielo empezó a nublarse. El aire mecía la panga, ‘el chayito’ decidió apresurar la revisión, estaba acostumbrado a los chubascos que suelen formarse en agosto. Desde pequeño sus cuatro hermanos mayores le habían enseñado el oficio de la pesca.

Ya estando en su casa, se soltó un vendaval tan fuerte como los que se presentan cuando azota un huracán. La incesante lluvia acompañada por rayos y centellas que iluminaban el atardecer de la comunidad de El Mahone, bautizada así en memoria del pueblo que quedó sepultado debajo del agua en el vaso de la obra hidráulica, al igual que los pueblos indígenas de Sinaloita y El Toro. Hoy las familias desplazadas hace casi 70 años de esos pueblos viven en Juan José Ríos.

En El Mahone, desde la loma donde vive la familia Blanco, a lo lejos se alcanza a distinguir la estatua en memoria a don “Miguel Hidalgo y Costilla” que se ubica a la izquierda de la cortina de la presa. Esa noche solo los rayos iluminaban la estatua.

‘Chayito’ no supo en que momento, la icónica figura del libertador de México desapareció ante sus ojos después de que un rayo cayera sobre la cabeza del héroe de la independencia.

“Fue un rayo que ilumino todo el pueblo y hasta hizo que los plebes brincaran del susto por el estruendo”, señalo.

Media hora después, los habitantes de El Mahone tuvieron que salir temerosos de sus casas porque de manera inusual, las camas y los catres empezaron a moverse por un temblor de magnitud 4.7 cuyo epicentro fue localizado a unos kilómetros de esa comunidad.

La recia figura de don Miguel Hidalgo y Costilla abandonó el pedestal que la sostuvo durante 66 años y terminó fragmentada en el rocoso suelo.

La historia.

El día jueves 02 de enero de 1947, el Presidente de la República, Miguel Alemán Valdez, crea por decreto la Secretaria de Recursos Hidráulicos y cinco meses después, el viernes 27 de junio de ese año, el ejecutivo federal ordena la creación de la Comisión del Rio Fuerte, cuyo primer Vocal Ejecutivo fue el ingeniero Heriberto Valdez Romero.

La construcción de la presa.

En su edición del jueves 28 de febrero de 1952, el periódico El Debate de Los Mochis público en su portada: “Llega la maquinaria para hacer la presa”.

La compañía ‘El Águila’ construiría la primera etapa de los trabajos de la trascendental obra, que inicio a mediados de ese año.

El lunes 02 de julio de 1951, la compañía constructora ‘Eureka’ había empezado la construcción de los trabajos de terracería de 14 kilómetros del camino de El Fuerte-El Mahone, el residente de la obra fue el ingeniero Evodio de la Vega.

Quiero precisar que antes de la construcción de la presa “Miguel Hidalgo”, el valle de El Fuerte ya contaba con el canal SICAE y el canal Cahuinahua que se alimentaban de la presa derivadora de San Blas conocida como La Bocatoma, pero fue muchos años atrás, en julio de 1892, ahí mismo en su casa de San Blas, cuando el ingeniero norteamericano Eugene Tays, nacido en New York, diseñó los planos para la construcción del primer canal de riego del noroeste de México, el canal Tastes, por indicación de don Benjamín Francis Johnston, fundador de la ciudad de Los Mochis. 

Ya el mismo ingeniero Tays había diseñado el ramal por donde habría de transitar el ferrocarril Topolobampo-Kansas (el Ch-P), uno de los proyectos más ambiciosos de Albert K. Owen y que finalmente quedo en manos de Benjamín Francis Johnston. 

El ingeniero neoyorquino quien fue creador del primer canal de riego y del ramal del ferrocarril Chihuahua al Pacifico, se casó en San Blas y ahí estableció su residencia.

El ingeniero Heriberto Valdez Romero, residente de la Comisión del Rio Fuerte y ‘padre’ de la presa “Miguel Hidalgo”, aunque había nacido en Zamora, Michoacán 

el miércoles 22 de marzo de 1922, después de titularse como Ingeniero Civil en la UNAM, trabajó en la construcción de diversas obras en el país y había estado en Los Mochis en 1940 contratado por la United Sugar Company para construir el mercado municipal. 

Valdez Romero se quedó en Sinaloa, fue el constructor de los canales SICAE y Cahuinahua, junto a los cerros de Camayeca. En 1950 construye la presa derivadora Cahuinahua y luego la de Sufragio. En ambas obras trabajo mi padre como carpintero de obra negra junto a Valdez Romero.

Mis padres contraen matrimonio religioso, el ingeniero Valdez Romero invita a mi padre a trabajar en la construcción de la presa “Miguel Hidalgo”, fue en la comunidad de El Mahone donde los recién casados Simón Torres y Francisca Sotomayor fijaron su residencia. 

Mi padre Simón Torres me relató hace años, cuando yo era un adolescente y el aún vivía, que él fue testigo cuando el ingeniero Valdez Romero le preguntó al ingeniero Guillermo Garnier:

“¿Cómo quedaría una estatua de don “Miguel Hidalgo” en esta parte del cerro?”.

A Garnier Villagrán jamás se le olvido el proyecto de la estatua.

Amo a mis padres.

En 1953 la construcción de la presa estaba en su máxima expresión. El domingo 27 de septiembre de 1953 el ingeniero Valdez Romero lleva a sus dos hijas y un sobrino a una exploración a los cerros de Camayeca.

En una de las laderas del ‘cerro del cochi’, mientras caminaban por una vereda unas rocas se desprendieron cayendo una de ellas sobre Valdez Romero. Al pedir auxilio, los ejidatarios Carlos Cota y Guillermo Ruiz bajaron el cuerpo hasta que fue trasladado a un hospital en Los Mochis, el golpe había abierto una herida que había logrado alcanzar la masa encefálica.

El ingeniero Heriberto Valdez Romero jamás volvió a ser el mismo de antes y murió dos años después, el 24 de agosto de 1955 mientras hacia oración en la Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe en la Ciudad de México.

Su cuerpo fue enterrado en las inmediaciones de la presa “Miguel Hidalgo” porque esa fue su última voluntad. Un año después, la presa que el construyó empezó a irrigar miles de tierras del valle de El Fuerte. 

La estatua de don Miguel Hidalgo.

El ingeniero Guillermo Garnier quien al ponerse en marcha la operación de la presa como Residente de Operación, se quedó con el compromiso de cumplir el último deseo del ingeniero Valdez Romero de instalar una estatua en honor a don Miguel Hidalgo.  

En 1987, el ingeniero Garnier y yo fuimos compañeros de trabajo en la administración del alcalde Manuel Sauceda. Garnier era director de Obras Publicas y yo de Acción Social y Cultura y simultáneamente del DIF municipal.

Como residente de operación de la presa “Miguel Hidalgo”, solicitó la instalación de la estatua del Héroe de la Independencia y fue en 1955 cuando fue instalada en su pedestal hoy solitario.

La crónica me la relató el propio ingeniero Guillermo Garnier cuando juntos acudimos a Choix, al sepelio de don Lencho Mundo, padre de mi compadre ‘Lenchito’ Mundo y de la ex diputada local y ex alcaldesa, Elba Mundo Vega de Navarro.

Recuerdo que en aquella vieja camioneta Dodge blanca de Obras Publicas en la que hicimos el viaje a Choix, al ingeniero Garnier solo le quedaba la reserva de gasolina en el tanque.

“No vamos a alcanzar a llegar ingeniero”, le dije preocupado.

Y él, que era un experto en cálculo y matemáticas, cuando llegamos a la altura de Bajósori, para mi sorpresa, le quitó el cambio a la camioneta y sin apagarla me aseguró.

“Tú no te preocupes, vamos a llegar hasta la casa de la Elba Mundo con pura viada”, así fue, sin gastar una sola gota más de gasolina llegamos al sepelio.

Las confesiones.

El ingeniero Garnier me hizo algunas confesiones durante el trayecto.

Me confesó que gracias al ingeniero José Luis López Ramos, había conocido a su esposa, la señora María López que era su sobrina.

“Éramos compañeros en la Comisión del Rio Fuerte, el me la presentó, el ingeniero López Ramos es de El Fuerte y mi esposa es su sobrina”.

El monumento a Tlaloc.

También me dijo que la idea de construir una réplica del dios Tláloc fue suya.

“La construimos a base de piedra negra volcánica que las maquinas extrajeron del cerro de El Mahone, con el apoyo de don Humberto Ruiz quien realizó los planos a base de cortes horizontales. Fue en el año de 1966 cuando se instaló este gran monolito al dios Tláloc en la margen derecha de la presa, a la salida del camino que conduce a los pueblos de ‘Tres Hermanos’ y ‘La Viuda’, en el municipio de Choix”.

Imponente estatua de piedra en honor a Tlalóc, dios de la lluvia en la presa «Miguel Hidalgo».

De los tres grandes iconos de la presa “Miguel Hidalgo” que son, la estatua del héroe de la Independencia, la estatua del dios Tláloc y la tumba donde yacen los restos del ingeniero Heriberto Valdez Romero, solo quedan dos.

La estatua ícono de la magnífica obra hidráulica que trajo riqueza al valle de El Fuerte ya no está en su pedestal.

En una próxima entrega relataré sobre los héroes que formaron la Comisión del Rio Fuerte.

Oído por casualidad.

Casi casi lo dijeron en presencia del Presidente del PRI Ahome, Fernando Zapien. 

Dos mujeres platicaban a la entrada del edificio del partido tricolor. Una de ellas era Presidente del Sub Comité de la Sindicatura Central, la otra venia del valle del Carrizo buscando un apoyo económico.

“Cuando se me atora la carreta siempre vengo a pedir apoyo económico y, desde hace años, a los únicos del PRI a los que no les duele meterse la mano a la bolsa para ayudar a los que estamos jodidos son Fernando Zapien y el licenciado Vargas Landeros, de los demás mejor ni hablo”, señaló la mujer de El Carrizo.

Ese año el Gobernador de Sinaloa era Jesús Aguilar Padilla y Mario López Valdez era Senador de la República, mientras que Fernando Zapien cada diciembre regalaba pollos para las familias pobres del municipio de Ahome.


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