Crónicas de un periodista… Daniela Romo triunfó en la lucha contra el cáncer de mama

Compartenos

Por: Agustín Torres Sotomayor

Si me permiten hablar… Daniela Romo y yo no somos amigos, somos gemelos astrales, tal y como ella me lo expresó el jueves 25 de agosto de 1983 en el restaurante «Anita» de El Fuerte, Sinaloa.

Ese año, Daniela realizaba una gira de promoción al disco que había grabado en Madrid, España bajo la producción del compositor italiano Danilo Vaona, el disco llevo su nombre «Daniela Romo».

En las radiodifusoras de todo el país ya sonaban las canciones «Mentiras», «Te amo», «La ocasión para amarnos» y «Pobre secretaria» que le compuso Miguel Bose.

Daniela había estado en Mazatlán, Culiacán y en Los Mochis, su compañía discográfica Hispavox, filial española de Discos Gama, me dio la exclusiva, ese año yo trabajaba como director artístico y locutor de la radiodifusora XEPNK Canal 88.

La entrevista para la radio se realizó en el estudio de grabación de Promomedios Mochis de don Roque Chávez Castro, el estudio lo dirigía otro fuertense distinguido, Ernesto «Neto» Ayala.

Ese jueves 25 de agosto invité a Karina Terrazas, mi querida hermana, mi amiga y compañera de la carrera de Comunicación de la Universidad de Occidente. Era su sueño conocer a Daniela. Karina Terrazas (qepd) llegó con su cámara fotográfica, la fotografía que hoy comparto fue tomada por ella.

La entrevista culminó a las 2 de la tarde. Hacia hambre y dije a la cantante:

“Daniela si gustas te invitamos a comer. Ella me respondió que tenía que regresarse a Culiacán pues saldría a la Ciudad de México en el último vuelo. Con el entusiasmo por tener a quien había su ídolo de toda la vida, Karina Terrazas insistió. Ándale Daniela, vamos mija, vamos a comer”.

Confieso que tuve que emular a Pancho Arizmendi que siempre presume tanto a El Fuerte yo le copie, quise presumir la tierra de mi madre.

Karina y yo subimos a Daniela Romo al automóvil y nos enfilamos a nuestro querido Pueblo Mágico de El Fuerte. Me dio pena. 

Ese año la carretera era de dos carriles y estaba llena de baches por las lluvias, (hasta que llego el Gobernador de Sinaloa Juan S. Millán y nos construyó una supercarretera de 4 carriles).

En campo Esperanza se nos cruzó un hato de vacas y tuvimos que detenernos. La Daniela Romo estaba encantada. Aprovechamos la parada para comprar fruta.

Llegamos al hermosísimo Fuerte del Marques de Montesclaros, presumí a Daniela la historia del pueblo. La llevamos al Palacio Municipal y después de un recorrido por la plazuela entramos al restaurante «Anita» donde nos recibió don Pascual Anaya Cota.

Cuando entramos, del lado izquierdo la mesa estaba ocupada por el ministerio público, a la derecha salude a don Isabel Ramos Santos, director del periódico El Debate de Los Mochis que estaba acompañado por amigos. 

Don Pascual Anaya nos atendió personalmente como era su costumbre. Unos callos de lobina para abrir el apetito y después una orden de cauques pidió la famosa cantante. 

Gemelos astrales.

Mientras servían la comida, hablábamos de cosas personales.

Fue cuando le dije a Daniela, “eres unas horas mayor que yo”.

“¿Como?”, respondió ella. 

“Si, tu naciste en la noche del jueves 27 de agosto y yo en la madrugada del viernes 28”, afirmé.

“¡Somos gemelos astrales, somos Virgo!”, respondió ella.

El retorno fue tranquilo, de bromas, anécdotas y remembranzas personales.

Daniela nos contó a Karina y a mí que en 1983 mientras grababa el disco había vivido en la casa de Miguel Bosé en España.

“Andaba entre la ciudad de Brieva en Segovia, Valencia y Madrid, en las casas que tenía doña Lucia Bose», madre del célebre cantante.

Nos contó como Miguel Bose organizó un convivio en su casa madrileña y ahí le presento a Rocío Dúrcal, Junior, Rocío Jurado y José Luis Perales, que fue quien le compuso la canción «Celos».

El mismo Miguel Bosé compuso para ella la canción «Pobre secretaria» aunque también llevaba desde México la canción «De mi enamórate» que le regaló Juan Gabriel. Todas las grabó en el estudio madrileño de su compañía discográfica Hispavox.

Daniela nos confío a Karina y a mí, que su madre doña Teresa Corona fue madre soltera y que la criaron ella y su abuela, después nacería su hermana 5 años menor.  

Con las regalías de los discos y las presentaciones en Latinoamérica, Daniela compró a su madre doña Teresa Corona, la casa de Querétaro donde vivió hasta el 28 de septiembre de este año que murió de Covid-19. 

Recordó como en su infancia, gracias a que doña Teresa y su abuela que la llevaban a misa todos los domingos, pudo incorporarse al coro de la iglesia donde cantaban los hermanos Zavala, a los once años inició su carrera como cantante con el apoyo de ellos. 

Fueron las ‘micheladas’ del restaurante «Anita» que nos preparó don Pascual.

El viaje de regreso de El Fuerte a Los Mochis se nos hizo corto. Daniela recordó que desde niña admiraba a Rocío Dúrcal, de ahí nació el deseo de ser cantante y que en 1978 dejó de ser Teresa Presmanes Corona (su nombre real) para convertirse en Daniela Romo. Si fueron las micheladas.

La última grabación de Daniela Romo es la canción «Vencer el desamor» que es el tema de la telenovela del mismo nombre que hoy trasmite Televisa a través del Canal de las Estrellas.

La lucha contra el cáncer de mama.

En el 2011, Daniela Romo inicia una lucha sin futuro, vencer el Cáncer de Mama.

Los oncólogos que consultó no le daban esperanza de vida, prácticamente la desahuciaron. Fue gracias a Dios, a las oraciones de miles de sus fanáticos y a su amor por la vida lo que la salvaron.

Ese jueves 25 de agosto de 1983 que veníamos de El Fuerte entendí que éramos gemelos astrales porque ella nació dos horas antes que yo, el jueves 27 de agosto en la Ciudad de México, a las 11 de la noche para ser exactos en un hospital, mientras yo nacía en el callejón Doctor Brown de Guasave a la una de la madrugada en la casa de mi madre que fue auxiliada en el parto por doña Rafaela, esposa de don Luis Ibarra (director de la emblemática Orquesta Ibarra de Guasave, con la que cantó por primera vez Pedro Infante y en la que su padre don Delfino Infante García fue clarinetero).

Daniela Romo enfrento el Cáncer de Mama el 2011 y lo venció. Yo enfrenté el cáncer de estómago el 2004 y aunque no lo he vencido, a ambos nos desahució la ciencia médica y ambos tenemos por prescripción médica, que seguir atendiéndonos de por vida. Dios nos dio una segunda oportunidad.

Ahora sé porque somos gemelos astrales como nos dijo Daniela Romo a Karina Terrazas y a mí.


Compartenos