Por: Agustín Torres Sotomayor
Si me permiten hablar…” Ahí están los baldes con engrudo, las brochas y ahí están los posters del candidato plebes, quiero que peguen en todos, pero en todos los postes del municipio la foto del candidato”, así fue la orden que nos dio Cruz Eduardo Soto Ayala conocido como ‘el mudo’.
Era el guía moral del Movimiento Juvenil Revolucionario (MJR) del PRI en El Fuerte y entre la bola de 15 plebes, estábamos ‘el Bucho’ Lugo, ‘pachilo’ Cuevas, ‘pay’ López, Miguel ‘el todas mías’ de San Blas (qepd), Mario ‘mokaly’ Ayala, Santiago quien era cuñado del ‘zurdo’ Flores, un sobrino del ingeniero Ismael Armenta Chávez y otros plebes de los que penosamente debo confesar que no recuerdo sus nombres.
Fue a principios de la década de los 80’s, Cruz Eduardo era el operador político del MJR y con quien los candidatos a Presidente Municipal y a Diputado Local solucionaban la difusión de sus campañas.
Éramos pues, la plebada que sin ganar un solo centavo trabajábamos en las campañas del PRI, y ‘el mudo’ como afectuosamente le decíamos, era el que partía ‘el queso’, quien ponía y quitaba dirigentes juveniles.
En una palabra, nos tenía ‘apantallados’.
35 años después, en el 2018, siendo yo director de Comunicación Social del Ayuntamiento de El Fuerte, Cruz Eduardo Soto Ayala estaba a punto de jubilarse como director de escuela, salió con ese cargo de la secundaria IMA de Los Mochis luego de una controversia que tuvo con algunos padres de familia y la SEPyC dependencia que canalizó a la jefatura de Servicios Regionales de El Fuerte para que completara los meses que debía cumplir para su jubilación.
Un día del año 2018, alguien de muy arriba le paso ‘el pitazo’ que venía a El Fuerte Aurelio Nuño, Secretario de Educación Pública del Gobierno Federal del entonces presidente de México, Enrique Peña Nieto.
Ni tardo ni perezoso, ‘el mudo’ le invento a su esposa un viaje de trabajo a las Barrancas del Cobre.
Con la información confidencial de la visita del funcionario federal que, dicho sea de paso, ni el Secretario de Educación Pública del Estado de Sinaloa tenia, Cruz Eduardo subió al tren ‘Chepe’.
Por más que buscaba a Aurelio Nuño no lo encontró. Recorrió cada uno de los vagones hasta que vio al funcionario federal acompañado de su esposa.
Experto innato en meterse como la humedad, Cruz Eduardo lo saludó, se presentó y diez minutos después sonreían los tres como si se conocieran de hace miles de años. Esa es la magia de ‘el mudo’.
Después del recorrido por Creel y el lago “Arareco” nació una amistad que continuó a través de las redes sociales.
Antes fue priista y hoy simpatiza con MORENA, y yo lo recuerdo con admiración y afecto a mi amigo Cruz Eduardo Soto Ayala, les pido una oración porque esta delicado, hospitalizado en Culiacán por coronavirus.
Por desgracia tenemos en el Fuerte muchos amigos luchando por su vida y agradeceré también una oración por ellos.
Por mi ex jefe y amigo, el ex alcalde fuertense Víctor Sarmiento Armenta ‘el Semas’, hace unos días su hija buscaba un Oxímetro para darle auxilio médico.
El beisbolista del ejido Dos Abril, ‘memín’ Cazares, hermano de ‘chayín’ Cazares que jugó con los Cañeros de Los Mochis y Tomateros de Culiacán y de manera especial para mi amiga Berta Pacheco de San Blas.
Hagamos oración por los enfermos de Covid-19. Dios nos escuchara y yo se los agradeceré eternamente.
